Alejandro Magno.

Alejandro Magno

A. Guzmán & F.J. Gómez Espelosín

Alianza Editorial

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Alejandro el Grande, un mito por derecho propio, nació en Pella en el 356 a.c. (Macedonia) en el 336 a.c y con solo veinte años ya era rey de Macedonia tras el asesinato de su padre Filipo a manos de uno de los hombres de su guardia personal llamado Pausanias (algunas fuentes afirman que podrían haber sido amantes).Aprendió Alejandro todo lo relacionado con la vida militar, donde destacó en el perfeccionamiento de su mejor arma, sin ninguna duda, la falange Macedonia, que hasta la llegada de las legiones romanas y las derrotas en las batallas de Cinoscéfalos y Pidna, no encontró enemigo al que no pudieran someter.Las falanges estaban acompañadas de su poderosa e inquebrantable caballería, los hetairoi (los compañeros).


Donde probablemente no estuvo Alejandro a la altura de su padre fué en los temas relacionados con la política, sobre todo en sus relaciones con las demás ciudades estado griegas; aún siendo Aristóteles su mentor y el encargado de forjarlo intelectualmente.

En este libro los escritores, Antonio Guzmán Guerra y Francisco Javier Gómez Espelosín, nos presentan un ensayo sobre una de las figuras históricas más importantes en la historia de la humanidad. Los autores no tratan de entrar en profundidad ni en dar una gran cantidad de datos, se limitan a suministrar unas pistas, unas pinceladas de lo que fue Alejandro y de todo su entorno, en especial de su padre Filipo II de Macedonia. También están presentes sus conquistas, porque no olvidemos que él fue un conquistador, que consiguió formar un inmenso imperio desde su Macedonia natal hasta la India, un imperio forjado a sangre y fuego, conquistando todo a su paso con un ejército que lo acompaño prácticamente hasta el final de sus días, un ejército que estuvo a su lado más de una década y solo se opuso a continuar más allá de la India después de derrotar al rey Poro en la batalla de Hidaspes en el 326 a.c.

Asedió y destruyó multitud de ciudades, pero también las creó, el mayor ejemplo es la gran ciudad egipcia de Alejandría, donde uno de sus generales y más estrechos colaboradores comenzaría, a la muerte de Alejandro, una dinastía propia, la de los Ptolomeos que perduró hasta la muerte de Cleopatra y de su hijo Cesarión, anexionándose posteriormente el emperador romano Augusto todo Egipto y convirtiéndolo en una provincia romana en el año 30 a.c.

Éste es un libro dirigido a los no iniciados, ideal para los que no conozcan en demasía a este histórico e importantísimo personaje y quieran evitar empezar con una obra mayor, más densa y que como sucede en este tipo de ensayos pueda llegar casi a abrumar con una cantidad ingente de datos. Un personaje que unos consideran un visionario, un héroe y otros un auténtico tirano con aires de grandeza y tintes megalómanos.

Alejandro falleció en el 323 a.c en Babilonia, víctima de fiebres tifoideas o según otras teorías envenenado, sin dejar un claro sucesor, lo que inicio un feroz reparto entre sus más allegados generales, y como resultado, su imperio, el gran imperio de Alejandro Magno se desmoronó en muy poco tiempo, eso sí, dejando su legado por cada uno de los rincones que hizo suyos.

Todos los grandes conquistadores de la historia se han inspirado en Alejandro de alguna u otra forma, desde Julio Cesar (Julio Cesar // La guerra de las galias) a Napoleón Bonaparte. Sus estrategias en la batalla se han estudiado y copiado hasta la saciedad, particularmente sus movimientos de caballería, donde esta ejercía de martillo empujando al enemigo hacia la falange que hacia el papel de yunque, aplastando a este en una brillante maniobra envolvente. 

En definitiva y repitiendo lo anteriormente expuesto, se trata de un buen libro iniciático, un libro que puede abrir el interés al lector por este importantísimo personaje histórico, por éste inolvidable e inigualable fragmento de nuestro pasado.

Escrito por V.M.T