Puertas de fuego.

Puertas de fuego
Steven Pressfield
DeBolsillo

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La batalla de las termópilas, una batalla repleta de simbolismo, quizás incluso de romanticismo, una batalla que durante siete días brindó toda suerte de heroicidades, como escribió Heródoto (Heródoto; Grandes batallas del mundo antiguo) tras destrozar todas sus armas contra el enemigo combatieron “con uñas y dientes”. Un monumento se alza en el lugar de la batalla y en él se pueden leer unas palabras a modo de epitafio escritas por el poeta Simónides “Ve a decirle a los espartanos, extranjero que pasas por aquí, que, obedientes a sus leyes, aquí yacemos”. Ese fue el enfrentamiento en el que unos pocos vencieron a muchos.

Un choque de culturas, entre oriente y occidente, entre la expansión conquistadora y la defensa de una tierra, eso fue entre otras muchas cosas esta batalla y eso es lo que el autor nos quiere trasmitir.

Steven Pressfield nos traslada a un periodo histórico apasionante donde el imperio persa es un autentico rodillo militar, la gran potencia emergente de oriente y que tiene desde hace años sus miras puestas en Grecia, una Grecia que si llega a ser conquistada le abriría las puertas de Europa, en este caso le toca el turno al emperador persa Jerjes el intentarlo, para ello moviliza a una enorme ejercito para enfrentarse a unos pocos miles de aliados griegos a cuyo mando esta el rey espartano Leónidas, y a su lado trescientos de sus mejores guerreros.

El buen hacer del escritor nos permite adentrarnos en este periodo, nos describe el modo de vida espartano, el laconismo, la melancolía de la que hacían gala, personas austeras preparadas y entrenadas durante toda su vida por y para luchar, mentalizados para ser soldados profesionales, destinados a convertirse en el mejor ejercito de su tiempo. 
Pressfield dota a la novela en un buen porcentaje de rigor histórico, es por tanto también una obra recomendable para aquel que no esté familiarizado con la historia pueda obtener datos y comenzar a interesarse por  este tipo de lectura (Paul Cartledge; Termópilas).

Las páginas de esta novela nos relatan esta gran batalla, la vida espartana y la del propio protagonista, a través de los ojos de un personaje no espartano pero integrado en su sociedad, una sociedad a la que admira. Varias son las historias que se entrecruzan pero bien es cierto que el libro no pierde fuerza ni interés en ningún momento, a pesar de ser una historia sobradamente conocida, esto no impide despertar nuestro interés por seguir leyendo, deglutiendo sus páginas y saboreando sus palabras.

Pressfield nos traslada los valores de estos hombres, unos valores que en muchos casos y sobretodo desde un punto de vista actual (algo que no se debe de hacer en la historia) pueden ser considerados ciertamente anacrónicos e incluso calificarse de las formas mas hirientes que al lector se le pueda ocurrir, pero una cosa si que es cierta y es que esta sociedad provoca fascinación, por su historia, por ser únicos en su tiempo, ni buenos ni malos, ni fuego ni hielo, pero indiscutiblemente únicos.

Escrito por V.M.T