William Golding (1911-1993)
El Señor de las moscas
Alianza Editorial
Willian Golding recibió en 1983 el Premio Nobel de literatura por esta obra considerada a día de hoy como una novela de culto dentro de la literatura inglesa contemporánea. Publicada en 1954 esta emblemática novela distópica de Golding consigue dejar poso en el lector que irá conociendo a través de sus protagonistas los diferentes arquetipos sociales que imperan en la humanidad.
Representados entre otros por Ralph, líder de la comunidad y viva representación de la democracia; Jack, violento e insensato, efigie de los totalitarismos; Piggy, cívico y razonable; Simon, generoso y clarividente, fiel personificación de la amabilidad; y Rogger, frío y cruel, símbolo del sadismo más atroz. Son estos pequeños robinsones los que dan ficción a la obra de Golding donde un grupo de niños persistirán en una isla desierta, desamparados y a merced de los instintos más primarios de supervivencia, tras sufrir un accidente aéreo.
Una alegoría a la naturaleza humana donde la perdida de la inocencia infantil y la fragilidad de la personalidad pueril desembocan en la anulación de los principios morales más básicos, dejando al descubierto el verdadero comportamiento humano ante circunstancias extremas, donde la adversidad y ante todo el miedo imperante, desbordan el comportamiento racional. Golding experimenta con sus personajes, al igual que en la mayoría de sus textos posteriores, enfrentándolos a problemas morales que reflejan la impiedad innata del ser humano.
Aunque por momentos la prosa de Golding nos puede parecer excesivamente descriptiva conforma una narración certera y directa, incluso opresiva por momentos, llegando a conseguir que sea el propio lector el que se enfrente a sus propios miedos y debilidades mediante la reflexión y comprensión de esta fábula moral.
Escrito por Diego L.G
No lo he leído, es una de mis lecturas pendientes. Leí, sin embargo, Nada de Janne Teller, con la que dicen tiene algunas similitudes en cuanto al cruel comportamiento de un grupo de niños y que, por cierto, os recomiendo.
ResponderEliminarSaludos,